domingo, 7 de noviembre de 2010

Salud reproductiva en la vida de los adolescentes y la juventud.

Los acuerdos internacionales de derechos humanos aprobados en los últimos quince años defienden la salud reproductiva y los derechos reproductivos de los adolescentes. La Convención sobre los Derechos del Niño, de 1989, el instrumento de derechos humanos más universalmente aceptado, garantiza los derechos de los niños y los adolescentes, inclusive la protección contra la discriminación, los malos tratos y la explotación; la participación en decisiones que afectan sus vidas; el disfrute de privacidad; y el acceso a la educación y a los servicios de salud e información al respecto, para asegurar su bienestar. Todos esos derechos tienen repercusiones directas sobre la salud reproductiva de los adolescentes. En 1994, los gobiernos prometieron por primera vez abordar las necesidades de salud reproductiva y los derechos reproductivos de los adolescentes durante la Conferencia Mundial sobre la Población y el Desarrollo (CIPD). En 1995, en la Cuarta Conferencia Mundial sobre la Mujer celebrada en Beijing, los gobiernos reafirmaron ese compromiso y destacaron especialmente a la niña. En 1995, el Programa de Acción Mundial para los Jóvenes hasta el año 2000 y años subsiguientes consolidó un programa mundial relativo a esferas de importancia crítica que afectan directamente el adelanto hacia los ODM. Los Comités que supervisan el cumplimiento de tratados internacionales también han emitido recomendaciones sobre la salud reproductiva y los derechos reproductivos de los adolescentes y han expresado particular preocupación por la situación de las niñas adolescentes
Varios países han adoptado políticas y leyes para abordar la salud reproductiva de los adolescentes. En Albania, los servicios de salud reproductiva y de educación al respecto para adolescentes son gratuitos Kirguistán protege el derecho de los jóvenes a la atención de la salud reproductiva.La legislación de Benin estipula la provisión de servicios de salud reproductiva separados para los adolescentes. Panamá reconoce el derecho de las adolescentes embarazadas a la atención de la salud, la información sobre sus derechos y la educación continuada . Actualmente, Colombia protege concretamente el derecho de los adolescentes-inclusive los desplazados por conflictos internos-a la anticoncepción. Muchos países han establecido una edad mínima para contraer matrimonio, de conformidad con la Convención sobre el consentimiento para el matrimonio, la edad mínima para contraer matrimonio y el registro de los matrimonios, de 1962. Las políticas y leyes contra la trata de personas y la violencia, como las existentes en Bangladesh, el Níger y Filipinas, también prohíben el matrimonio en la infancia y el matrimonio forzado de las mujeres y las niñas, a cambio de dinero o bienes.En un distrito de Ghana, "Tiempo con la abuela" es una iniciativa que opera desde dentro de los parámetros culturales para llegar a las niñas adolescentes por conducto de las "reinas madres" tradicionales. Esas mujeres, que son líderes de sus comunidades y modelos de comportamiento para la juventud reciben ahora capacitación para figurar como mentoras de la generación más joven sobre cuestiones de salud reproductiva
En el último decenio, un creciente movimiento mundial de la juventud y la epidemia del SIDA han contribuido a que aumenten las acciones encaminadas a proporcionar servicios de salud reproductiva y educación al respecto en beneficio de los jóvenes. Se reconoce en general la acuciante necesidad de que los servicios de salud reproductiva sean más acogedores para los jóvenes y más impulsados por éstos. Las comunidades participan más eficazmente, por ejemplo, mediante acciones de difusión para eliminar el estigma asociado con los servicios de salud reproductiva para adolescentes. El importante papel de padres y madres se multiplica al educarlos acerca de los riesgos que enfrentan sus hijos y acerca de las necesidades y derechos de obtener información que puede afectar su bienestar y, en el caso del VIH, su supervivencia misma.

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